Para la remoción de estos recubrimientos en la actualidad se emplean productos químicos removedores, cepillos alambrados y arenado-granallado los cuales representan un peligro potencial y dentro de estas industrias las áreas de Seguridad Ocupacional tienen indicadores internos de los incidentes y/o accidentes que se presentan en los colaboradores directos e indirectos de estas operaciones.
Los productos químicos removedores generan vapores que pueden ser inhalados por el operador y/o personal ajeno a la operación de limpieza. En el caso de no usar los equipos de protección personal adecuados y de forma correcta, el operador está expuesto a la irritación de la piel, ojos y problemas respiratorios.
Las ruedas/gratas/cepillos de alambre, debido a la alta vibración y mayor peso para el esmeril angular/amoladora genera fatiga, problemas musculares y cuando los filamentos metálicos se rompen pueden incrustarse fácilmente en los ojos del operador u otra parte del cuerpo.
En los trabajos de arenado-granallado los operarios están sometidos a varios riesgos potenciales, algunos de ellos en relación directa a la tarea en si (polución, rebote del abrasivo con la pieza a granallar y el chorro directo del abrasivo) y otros relativos a todo trabajo que se realice en obra o en procesos industriales (altos niveles sonoros, golpes, etc.)
Nuestra compañía comprometida con la seguridad de las personas ha desarrollado una solución a través de productos abrasivos no tejidos Scotch Brite para poder realizar este trabajo de manera efectiva, segura y que cumple con la Norma Americana de preparación de superficies SSPC (Steel Structures Painting Council) en las categorías SSPC-SP 3 y SSPC-SP 11.
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